domingo, 6 de julio de 2014


La "milla extra" en el quehacer pedagógico

Por: Gloria Romero Zambrano
Docente Grado 507

La actualidad educativa Colombiana no es ajena a la temática que se visualiza en una película de los años 90; en esa época, realidad o presagio producto del imaginario de lo que se viviría en las aulas de muchos países como consecuencia de la disfuncionalidad de las familias, la pobreza, la discriminación racial y la injusticia social, entre otras.

La temática expuesta en la cinta "Mentes Peligrosas" contiene un mensaje dirigido a la comunidad educativa, para reflexionar sobre la manera adecuada de manejar los conflictos que a diario se presentan en nuestro quehacer pedagógico, máxime, cuando orientamos procesos que poco le dan importancia al cumplimiento de normas como parte de la formación integral del ser humano.

La metodología humanística para sortear estas situaciones de conflicto, utilizadas por la Profesora protagonista, es un modelo a seguir, ya que contamos con adolescentes cuya etapa está llena de conflictos que hacen parte de las características de esta difícil edad, pues están en busca de su autonomía y defendiendo su propia identidad sin tener en cuenta la autoridad, ya sea en casa o en el colegio; por ello se evidencian actitudes desafiantes que los llevan a tomar determinaciones y reacciones equivocadas, que solo les van a causar daño en el futuro. Uno de los principales escapes resulta siendo la drogadiccion, pues en nuestros espacios escolares, un gran porcentaje de niños antes de los 10 años, ya han optado por este camino, encontrando padres de familia impotentes ante esta situación y dejando en manos de la Escuela, el único apoyo y orientación para enfrentar la problemática, por lo tanto aquí  la Institución Educativa adquiere un papel relevante, sobre todo el Docente, que diariamente y con toda la carga académica, debe estar al frente de cada Estudiante con sus particularidades, aciertos y desaciertos.

De acuerdo a lo anteriormente expuesto, tanto Docentes como Directivos, debemos estar abiertos y dispuestos al cambio y no encasillarnos en cumplir con una programación de contenidos; se hace necesario conocer la realidad del Estudiante para aplicar estrategias que lo motiven a no oponer resistencia al cambio de actitud, no obstante, este cambio de paradigma debe empezar desde el sistema educativo nacional, flexibilizando sus políticas, concediendo herramientas físicas y humanas que permitan el buen desempeño del Docente.

Llama mucho la atención, la estrategia de la Profesora Protagonista, al enlazar un tema, en este caso desde el área de Español, para orientar a los estudiantes en el rescate de valores y específicamente, el de la VIDA, presentándose aqui una dualidad por cuanto la concepción de las estrategias no son aceptadas por las Directivas, pero con la persistencia de dicha Docente, se logran cambios tanto en los mismos Directivos, como en los Estudiantes y Padres de Familia.

En conclusión y con la realidad psicosocial que tenemos en nuestro medio educativo, se hace necesario tener un cambio de actitud, caminar esa milla extra y obrar con mayor resiliencia, para poder avanzar en nuestro diario quehacer pedagógico.